Dicen que los mejores libros salen de los peores sentimientos y soy fiel seguidora de esa oración. Desde hace más de un año he empezado a sentirme mal, no en el sentido corporal, pero, en parte este sentimiento no es nada saludable. Siempre fui de las personas que lloran mucho, por felicidad, enojo o lo más común, tristeza, y es chistoso porque siempre me suelen decir, “Es que tú eres tan alegre” “Eres tan divertida y chistosa”, lo que no saben, es que es una máscara que esconde mis mayores miedos y desafíos. Tengo 18 años y ya me canse de vivir, simplemente no me siento bien en este lugar, no soy feliz aunque por fuera se vea otra cosa, no soy buena en algo o tengo alguna habilidad especial, puede que alguien que este al otro lado de la pantalla se sienta igual, no lo sé. Vivimos en una época en la que dicen que es “La flor de la juventud”, en la que siempre llenan de cosas positivas, amigos, fiestas, amores, pero en realidad no la veo así, es como la comparación de “e
Soñando, estoy orgullosa de decir que me la pasó soñando, cuando tengo los ojos abiertos y cerrados, ¿por qué de que más se puede vivir, si no es de soñar? Y estoy harta, cansada, no doy más con la gente que te dice que no puedes lograr nunca nada, de que te digan que eres inútil, que nunca lograrás eso con lo que tanto sueñas o te desvelas, que quizás siempre has hecho todo mal, pero ¿por qué arruinar la vida de los demás así?, ¿por qué simplemente no dejar vivir a las personas? Y es que te haces más daño a ti cuando le dices cosas negativas a otro, que a esa otra persona, porque aquella persona puede armarse de valor y demostrarte que si puede lograr todo lo que él o ella quiere, porque no hay más motivación para lograr alguna meta, que querer hacerla. Por eso hoy quiero que sientan que todo lo pueden lograr, porque no importa cuántas veces te caigas, debes levantarte una más, y lo digo yo, que aunque, no me conozcas, he estado en el suelo miles de veces,